La Hamingja

La Hamingja (pronúnciese ja-MING-ya) es lo mas parecido a un ángel guardián que existe en el odinismo.  Es la fuerza espiritual que reside en nuestra cabeza y nuestras decisiones, que encarna nuestro destino, nuestra suerte y nuestro wyrd, que es algo así como el karma dentro del hinduismo.  La hamingja posee toda la sabiduría, inspiración, amor y fuerza que jamás necesitaremos para cumplir con el destino heredado, con nuestros deberes mas importantes, pero también puede ser fortalecida, aclarada, bendecida por medio de sacrificios y ceremonias.

Los misterios asociados con esta misteriosa presencia espiritual habitan entre los susurros de la runa Algiz, que representa al Alce.  Este tótem es interesante por sus cuernos, que crecen durante ciertas estaciones.  Del mismo modo, la hamingja activa ciertos instintos heredados que tienen que ver con el ciclo de vida, con la gestación, la pubertad, el envejecer, etcétera.  Hay ciertas fuerzas espirituales que despiertan en la vida sicológica, en el mundo de la persona, cuando pasa por los distintos momentos del ciclo de vida.

Se seca el pino en la colina,
ni corteza ni agujas lo guardan;
así es el hombre al que nadie ama.
¿Para qué sigue él viviendo?

- Havamal, Estanza 50

También del mismo modo que los alces son animales de manada, las almas también viajan juntas.  Un solo palo no hace selva.  El hombre es un animal social.  La hamingja es un aspecto espiritual en gran parte heredado, es ancestral.  Por medio de la hamingja podemos accesar a todos nuestros ancestros, y a la larga la hamingja nos liga a todo el Arbol Cósmico que incluye a todas las entidades vivientes del multiverso: es nuestra antena al resto del mundo espiritual.  De hecho, si miramos la runa Algiz vamos a ver que tiene la apariencia de unas antenas ...

A veces la hamingja se sobrecarga.  Personas de carácter caliente que pierden la paciencia fácilmente, o que están pasando por dificultades, pueden calmar su hamingja o apaciguarla refrescando su cabeza con agua fresca, o se puede fortalecer la hamingja con sacrificios.  La hamingja dirige la evolución de toda la corriente de vida.  Por eso es importante entenderla y cultivar una relación con ella, hacerla la mas prominente de nuestros aliados espirituales.